Síguenos
Fagor Professional Blog | Tendencias y consejos | Buenas prácticas y normativa en higiene y seguridad alimentaria para restaurantes

Buenas prácticas y normativa en higiene y seguridad alimentaria para restaurantes

Hay pocos sectores donde las buenas prácticas de higiene y seguridad alimentaria sean tan importantes como en el de la hostelerí­a, ya que los errores cometidos en este campo pueden tener consecuencias muy negativas para los clientes y, consecuentemente, para el buen nombre y la supervivencia del negocio.

Hoy queremos repasar los distintos aspectos y normativas relacionadas con estas buenas prácticas, que deben ser aplicadas por todos los negocios de hostelerí­a y restauración.

Normativa

Existen varias normativas nacionales y autonómicas que regulan la higiene y seguridad alimentaria en los restaurantes, cafeterí­as y otros negocios de restauración. Estas son las más importantes:

Real Decreto 2207/1995 de 28 de diciembre, que establece las normas de higiene de los productos alimenticios.
Real Decreto 109/2010 del 5 de febrero. Este Real Decreto deroga el anterior del año 2000 y establece las normas a seguir por los manipuladores de alimentos y la responsabilidad de las empresas de alimentación respecto a la higiene de sus instalaciones y productos, proponiendo sistemas de autocontrol de Análisis de Peligros y Puntos de Control Crí­tico (APPCC).
• Real Decreto 3484/2000 de 29 de diciembre, que establece normas de higiene en la elaboración, distribución y comercio de comidas preparadas.
Reglamentos 852/2004 y 853/2004 de 29 de abril, que se refieren a la higiene de los productos alimenticios y a las normas de higiene en la manipulación de productos de origen animal.
• Normativa 1169/2011 o Ley de la Información Alimentaria que especifica las obligaciones de las empresas que ofrecen alimentos a la hora de informar sobre los alérgenos presentes en los mismos.

Contaminación de los alimentos

Un alimento está contaminado cuando contiene sustancias que no debieran estar en el mismo y que pueden suponer un peligro para la salud del consumidor. Las fuentes principales de contaminación de alimentos son:
• Medio ambiente
• Plagas
• Utensilios y locales
• Otros alimentos
• Manipuladores de alimentos

Microorganismos

Los microorganismos son una fuente de infección y los responsables de las principales enfermedades de transmisión alimentaria. Se encuentran en todas partes y lo importante es controlar el entorno para que no aparezcan o proliferen en los alimentos. Una de las medidas más eficaces de control de los microorganismos es la temperatura, ya que estos son muy sensibles a la misma y pueden multiplicarse o destruirse según las condiciones en las que se encuentren. Las franjas de temperatura que afectan a los alimentos son:

• Hasta 0 oC. En los alimentos congelados entre -18 oC y 0° oC los microorganismos no se multiplican pero tampoco mueren.
• Entre 0 oC y 5 oC. En esta franja de temperatura, que se conoce como refrigeración, los microorganismos pueden reproducirse, pero de manera muy lenta.
• Entre 10 oC y 60 oC. Esta es la franja de temperatura más peligrosa, que favorece una mayor multiplicación de los microorganismos.
• Más de 65 oC. El cocinado a más de 65 oC es una de las maneras más eficaces de acabar con los microorganismos, la mayorí­a de los cuales se destruyen a estas temperaturas.

Almacenamiento

El almacenamiento de los alimentos frescos o cocinados en cualquier negocio de restauración debe cumplir con unas condiciones mí­nimas para asegurar su vida útil y evitar contaminación y riesgos para la salud:

• Evitar el contacto directo con el suelo y las paredes.
• No sobrepasar la capacidad de los frigorí­ficos y cámaras refrigeradoras, porque evita que estas funcionen correctamente y se consigan las temperaturas deseadas.
• Almacenar los productos de manera adecuada, de manera que sea fácil identificar los que llevan más tiempo guardados para poder darles salida en primer lugar.
• Controlar la temperatura de las cámaras refrigeradoras al menos una vez al dí­a.
• No abarrotar los espacios de almacenamiento, permitiendo la circulación del aire entre los productos.
• No almacenar alimentos crudos y cocinados en zonas próximas.

Manipuladores de alimentos

Los manipuladores son una de las posibles causas de contaminación de los alimentos, y es necesario que sigan estrictas normas de higiene atendiendo a los siguientes aspectos:

Higiene personal: además de una higiene personal adecuada es necesario que los manipuladores de alimentos desarrollen hábitos adecuados de lavado e higiene de manos y protección frente a la saliva y la respiración
Salud: es necesario prestar atención a cualquier sí­ntoma que pueda estar relacionado con una enfermedad contagiosa o de transmisión alimentaria y también cubrir y desinfectar adecuadamente todos los pequeños cortes y heridas tan comunes en esta profesión y que pueden ser una fuente de contaminación.
Ropa de trabajo: la ropa de trabajo debe utilizarse únicamente en el puesto de trabajo y estar limpia y libre de desgarros donde pueden acumularse los microrganismos. El pelo o la barba debe estar adecuadamente cubierto por gorros o redecillas protectoras y no está permitido llevar objetos de adorno personal como joyas o relojes mientras se trabaja, ya que estos pueden acumular suciedad que se trasmita a los alimentos. Cuando sea necesario, deberán utilizarse guantes desechables.

Cuando hablamos de seguridad e higiene alimentaria en un restaurante u otro negocio de restauración, es mucho lo que está en juego, y merece la pena hacer un esfuerzo extra en este aspecto, independientemente de la molestia que siempre suponen las inspecciones.

¿Qué medidas tomáis para garantizar la higiene de vuestros productos y vuestros empleados? ¿Habéis tenido alguna vez algún problema sanitario, a pesar de haber tomado todas las medidas necesarias? Os invitamos a compartir vuestra experiencia con nosotros en las redes sociales.

Imagen: engagenewswire

Deja un comentario.

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *