Se supone que a los 18 años de vida se llega a la mayoría de edad, pero la feria Hotelex, que se celebra anualmente en Shanghai desde 1992, ha necesitado menos tiempo para situarse como la principal referencia del sector hostelero en el mercado asiático. Todo aquí es desmesurado: el área de exposición en el Shanghai International Expo Centre de 60.000 metros cuadrados, los 850 expositores y los más de 50.000 visitantes que llegan a ella procedentes de todos los países del mundo.
Rodeados de los omnipresentes dragones que decoraban el escenario, ha quedado claro que esta edición de la Feria, como otros muchos años, ha tenido mucho que enseñar, y lo ha dividido en nueve zonas principales: Catering, Panadería, Vajilla, Café y Té, Comida y Bebidas, Fitness y Tiempo Libre, Muebles y Textil, Electrodomésticos, e IT y Seguridad. En todos ellos expositores internacionales han presentado sus novedades, complementadas con demostraciones en vivo. Tras un intenso –y mareante– periplo, el cerebro terminaba embotado y se hacía difícil decidir qué había llamado más la atención: si los ultramodernos equipamientos para cocinas o la delicadeza de una vajilla elaborada según todos los cánones del refinamiento oriental.
El apartado gastronómico estuvo representado por demostraciones de cocina en vivo –que abarcaban desde pizzas hasta elaboración creativa de chocolate– y catas de vino, pero también hubo tiempo para la moda con eventos como el show de uniformes de hostelería, que corrió a cargo de la Shanghai Fashion Accessories Society, y la coctelería extrema en la competición de barmen, a cargo de la Hong Kong Bartender Association.
Y entre tanta actividad no falta tiempo para el exotismo y las sorpresas: desmintiendo la tradición que sitúa a los chinos como bebedores de té, la zona de Café y Té fue el escenario de la final de la competición nacional China Barista Championship en la cual se elije al mejor cafetero del país; quizá no fue solo la cafeína lo que provocó el alto grado de emoción del evento, sobre todo si se tenía en cuenta que el ganador pasará a representar a China en la final mundial, que se celebrará en junio en Londres.
Todo un banquete de hospitalidad y novedades que certifica que, en ocasiones, vale la pena viajar al otro rincón del mundo para estar a la última de la actualidad del sector.
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